Las nuevas tendencias educativas y las propuestas de cambio en educación

By on agosto 20, 2024

Se define a una tendencia como un horizonte renovador que tiende a mejorar sustantivamente tanto las ideas como las prácticas educativas de modelos o de propuestas anteriores; en este sentido las tendencias cada vez tienden a favorecer un mayor protagonismo de los sujetos en procesos de aprendizaje, valida los saberes acumulados previamente y tiende a movilizar dichos saberes con el compromiso de favorecer nuevos aprendizajes.
Las tendencias educativas llamadas renovadoras, también se inclinan en la utilización de dispositivos electrónicos y de los diversos aportes digitales y virtuales, incluyendo la inteligencia artificial, como recursos mediáticos para aprender, no sustituyen a los esquemas tradicionales, los cuales están ahí y se recurre a ellos en su justo término como alternativa mediática. Bajo esta perspectiva, el papel de los educadores tiende a definirse como un acompañante facilitador de procesos que vigila o guía y supervisa a los sujetos que aprenden para que los aprendizajes sean significativos y pensados para toda la vida.
Otra característica de las propuestas y los contenidos de las tendencias educativas renovadoras, es que la concreción curricular cada vez se hace más flexible, adaptándose a los sujetos en su contexto y a las especificidades en cuanto a los intereses y las diversidades socioculturales en que se encuentran los mismos. Se respeta su inserción de género, de etnia, de religión, e incluso el estatus socioeconómico en donde se ubican los propios sujetos, no busca una homologación social, sino más bien su deseo consiste en crear dispositivos de convivencia en donde todos podamos vivir al lado de los demás, aún en contextos de profundas diferencias y diversidades.
Otra búsqueda de las tendencias educativas renovadoras es el interés por lograr el desarrollo del pensamiento crítico en los sujetos. El pensamiento crítico que sirva para dilucidar, decidir y hacerse cargo de las decisiones tomadas, entre otras muchas cosas, son los atributos centrales de las nuevas tendencias educativas.
Ahora bien, ¿cómo se decide o se define que una tendencia educativa es legítima? Aquí se buscan dos cosas:

a) La pertinencia social de cada propuesta o tendencia educativa.
b) Y la solidez de sus sustentos psicopedagógicos que sirven de soporte para legitimarla.

Todo lo anterior forma parte de la innovación educativa o de la innovación en educación. En este sentido, no todo lo nuevo es educativamente bueno, ni todo lo viejo debe desecharse, aquí se requiere una especie de selección y de construcción ecléctica para construir propuestas socialmente pertinentes en primer lugar y, más adelante, poder experimentar en contextos específicos y dar muestra de sus ventajas y beneficios sociales y, sobre todo, educativos.

Con información: Revista Educarnos

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