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Pretendieron sobornarme en caso UDLAP: Miguel Barbosa

By on julio 7, 2021

El gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, respondió esta mañana a los integrantes del patronato defenestrado de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) y a los líderes de cúpulas empresariales que acusaron de una supuesta invasión policiaca en el campus por parte de su administración: “Yo no ni hago desmadres, ni hago chingaderas, las que las hacen son ellos”.

El mandatario estatal hizo esta mañana una amplísima explicación del conflicto en la institución educativa, desde su origen, revelando que los patrones depuestos intentaron sobornarlo en varias ocasiones, para que les permitiera continuar con su condición de privilegios y saqueo de la Fundación Jenkins.

Tras afirmar que rechazó los ofrecimientos ilegales del patronato extinto de la UDLAP, advirtió que no habrá ningún acuerdo de su administración que no pase por el retorno de la fortuna de 750 millones de dólares del patrimonio de la Fundación Jenkins a Puebla.

Barbosa Huerta dijo que la iniciativa privada que critica al gobierno de uso excesivo de la fuerza pública, siempre ha estado al tanto de las transacciones ilegales que sacaron de Puebla 750 millones de dólares de la Fundación Mary Street Jenkins, para colocarlos en paraísos fiscales como Barbados y Bermudas, a fin de sacarles provecho personal y traicionar la última voluntad del dueño de esa fortuna: William O’ Jenkins, quien determinó en su testamento que el dinero fuera usado para la UDLAP y otras obras de beneficio social.

Reveló que durante el morenovallismo, los patrones, ahora depuestos, tenían un trato privilegiado de parte del gobierno, al punto que ellos designaban a los integrantes de la Junta para el cuidado de las Instituciones de Beneficencia Privada, que a cambio les permitió malversar los fondos de la Fundación Mary Street Jenkins, pasarlos a otra fundación y finalmente, sacar el patrimonio del país.

En esa lógica, Barbosa Huerta acusó al aún rector de la UDLAP, “el panista”, Luis Ernesto Derbez: “él formó parte de la concepción, de la planeación, de la operación política de todo lo que pasó”.

Historia de un saqueo

“Hoy nuevamente voy a dar una opinión general sobre el tema de la Fundación Mary Street Jenkins y sobre el conflicto de la Universidad de las Américas como uno de los bienes propiedad de la Fundación”. El señor Guillermo Jenkins, aquel personaje mítico ya en esta zona de en el sur del Estado de Puebla, que formó un gran imperio económico, agrícola, pues sí, se dedicó a muchas actividades económicas y tuvo enorme éxito. Cuando se acerca el término de su vida, decide formar una fundación y la denomina con el nombre de su esposa, Mary Street Jenkins, y a esa Fundación se le incorpora todo el patrimonio del señor Guillermo Jenkins, un patrimonio cuantiosísimo en efectivo, bueno no en efectivo, en bancos pues, en capital líquido y en bienes, y se forma la fundación en el estado de Puebla”, inició Barbosa Huerta su declaración.

 “Como seguramente debe de haber en todos los estados de la República, existe un ente público que vigila el funcionamiento de las entidades de beneficencia pública, se llama aquí Junta de Asistencia para el Cuidado de las Instituciones de Asistencia Pública, cuyos integrantes los designa el gobierno del estado, y que vigila a las fundaciones y a las instituciones privadas. Las vigila y vigila que se cumpla la ley del caso, la ley que se aplica para este tipo de instituciones de beneficencia privada. Así transcurre la vida de la Fundación Mary Street Jenkins, llegando a ser de las principales fundaciones de beneficencia del país, no sé si la más importante, pero sí de las más fuertes quienes manejaban”, apuntó.

El mandatario denunció: “La fundación, de acuerdo a su constitutiva, a su escritura constitutiva, y de acuerdo a la ley, se maneja a través de un patronato, los integrantes del patronato se llaman patronos y quien los designa es esta Junta de Asistencia Pública, es pública porque la nombra el gobierno del estado, así ocurre por mucho tiempo. Cuando llegó este gobierno que encabezo, esta junta estaba al servicio de los señores Jenkins. Muchos acercamientos que hubo con este gobierno tenían que ver con que este gobierno nombrará a los integrantes de la Junta de Vigilancia de las Instituciones de Beneficencia, muchos, perdón, algunos acercamientos que tuvimos, no muchos, fue con ese propósito, que ellos querían nombrar a los integrantes de la Junta de Vigilancia, la institución pública, así con esa posición controladora qué ocurrió entre 2013 y años siguientes”.

Barbosa prosiguió con su relato: “Hubo una confabulación de los señores Jenkins, que también eran patronos de la Fundación Mary Street Jenkins, para poder sacar todo el dinero, sacar todo el dinero de la fundación y todos los bienes. Fue una conjugación de los señores Jenkins, del patronato de la fundación, de la que ellos formaban parte también y la llevaron a cabo con la anuencia de la entidad pública del gobierno del estado. Primero hicieron otra fundación y mandaron el capital del dinero de la Mary Street Jenkins a esa fundación, una fundación cuyas reglas son aquellas que les permiten a ellos disponer de dinero de la nueva fundación. Se llevaron primero el dinero a Aguascalientes, después se lo llevaron a Jalisco, donde tiene la sede un grupo de abogados que asesoran a los Jenkins. ¿Contra quién pelearon todo eso?, contra uno de ellos Guillermo, un nieto como los otros, pero que sostuvo que se debería de respetar la voluntad de su abuelo, de que el dinero del abuelo estuviera fuera de la fundación y que todos los demás, bueno, sigan recibiendo la canonjía que el señor Jenkins a los Jenkins les impuso: mil dólares mensuales”.

“Finalmente el dinero, después de estar en Jalisco, fue enviado a Barbados y de Barbados fue enviado a Panamá a paraísos fiscales. La Universidad de las Américas es de los pocos bienes que le quedan a la Fundación Mary Street Jenkins y bueno en la universidad se aloja desde su rectoría la concepción de todo lo que pasó, en todo lo que ocurrió todos participaron, todos participaron en eso”, sentenció.

Volvió a señalar: ¿Qué ha ocurrido?, bueno que la Junta de Vigilancia de Entidades de Beneficencia del estado, como un asunto de legalidad, porque todos todos en Puebla, empresarios y universidades conocen esta historia de haber dejado a la Fundación Mary Street Jenkins sin capital y habérselo llevado a paraísos fiscales, todos conocen eso: los empresarios de Puebla supieron de qué se trataba y de cuánto fueron las retribuciones a los hombres de poder de entonces y cómo se han repartido el dinero entre todos ellos”.

Entonces, sentenció: son “asuntos de legalidad, este gobierno no se presta a ninguna componenda. Porque sí quisieron, esa ala de interesados, acercarse al gobierno para hacer acuerdos de otro tipo y lo que les dije fue: ‘lo que diga mi dedito´(hace el ademán de negación)  a los que me mandaron: no,  no conmigo, no conmigo, así que este es un asunto de legalidad que hoy está sujeto a tribunales, nada más que está como violación al Estado de derecho, ¿qué significa la violación al Estado de Derecho?, lo que he dicho: privilegios para unos (…) y para que hayan dispuesto de todo el capital de la fundación a su beneficio”.

Acusó entonces a la iniciativa privada: “sacan voces de empresarios, sacan voces exhortando, porque dicen que inclusive la economía de Puebla se va a afectar. No señores, solamente rescatar para Puebla el dinero que sacaron del estado y que es de la Fundación Mary Street Jenkins, no va a haber ningún acuerdo que no pase por el regreso del dinero de Panamá y de Bermudas a la Fundación Mary Street Jenkins con su capital en Puebla, no va a haber ningún acuerdo. Todo lo demás no tiene importancia señores, ya hubo un abuso dispendioso. Vamos a ver de esos 750 millones de dólares cuánto pueden regresar, ese sí es un desmadre verdad, como ya ahí alguien lo dijo, que se iba a armar un desmadre: ¡no desmadre es el que armaron cuando se llevaron 750 millones de dólares! y le pregunto a todas las camaritas de empresarios: ¿qué opinión tiene de que el dinero esté en Panamá y en Bermudas?, ¿está bien eso?, ¿es Estado de Derecho? Que me digan esos jefecitos de las cámaras empresariales sí eso es Estado de Derecho o que continúen los privilegios, que haya un gobierno que le solape todo y que le pasen beneficios cuantiosos, como lo hicieron en el pasado con este gobierno”.

Sentenció: “No señores, aquí no admitimos desmadres, aplicamos la ley, que les quede claro y en el caso de Derbez, que no tenga preocupación sí él tiene las manos limpias, si ha manejado honradamente el patrimonio de la universidad, pues seguramente saldrá avante. pero él formó parte de la concepción, de la planeación de la operación política de todo lo que pasó, de todo, ¿carito, verdad?, ya para que quede perfectamente claro no va a haber ningún acuerdo con ellos hasta que no regresen el dinero a Puebla: los 750 millones de dólares, hasta que no regresen los bienes para que la fundación siga siendo una gran fundación. ¿O qué quieren un gobierno que siga viendo las chingaderas que se hicieron cómo se hicieron en Puebla? Yo no ni hago desmadres ni hago chingaderas, las que los hacen son ellos.

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