El estado registró un promedio de 0.55 casos por cada 100 mil mujeres, mientras que la media nacional fue de 0.49, de acuerdo con las cifras oficiales.

Las otras entidades que rebasaron la media en el país, fueron: Morelos, con 2.18; Nuevo León, con 1.05; Colima, con 1.04; Sonora, con 0.97; Chihuahua, con 0.90; Campeche, con 0.82; Tlaxcala, con 0.81; Tabasco, con 0.79; Baja California Sur, con 0.69; Durango, con 0.62; Nayarit, con 0.61; Veracruz, con 0.57; Ciudad de México, con 0.50 y Baja California, con 0.50.

De acuerdo con los datos del SNSP, actualizados este martes, la Fiscalía General del Estado (FGE) abrió 20 carpetas de investigación por el delito de feminicidio, la cual implica un promedio de cuatro casos al mes y uno por semana.

Los casos se concentran en los municipios de Puebla, con cuatro casos; así como Atlixco, Chignahuapan, Chignautla, San Martín Texmelucan y Tehuacán, con dos delitos de ese tipo, cada uno, por señalar algunos ejemplos.

Uno de los casos corresponde a Brenda Parras, quien en mayo pasado fue hallada sin vida enterrada en el jardín de su casa junto con su pequeño hijo, Irvin Gael, de 11 años, pues ambos fueron asesinados por otro hijo de la víctima, de nombre Erick Roberto N., de 23 años de edad.

El pasado 14 de mayo, una joven mujer, de profesión enfermera, fue asesinada en el interior de una clínica de la comunidad de El Álamo del municipio de Tlaxco, en la Sierra Norte de Puebla, en donde fue hallada sin vida por sus compañeros.

La hoy víctima fue identificada como María del Carmen R.C., de 28 años de edad, quien fue encontrada con una lesión en la cabeza y semidesnuda en el área de dormitorios del centro de salud mencionado por uno de sus compañeros.

En tanto que el pasado 28 de abril, fue encontrado el cadáver de Vianey Jiménez, una joven de 28 años de edad, en el relleno sanitario de la junta auxiliar de San Juan Acateno del municipio de Teziutlán, 24 horas después de que sus familiares la reportaron como desaparecida.

Horas después fue detenido un hombre identificado como César N., quién era jefe de la hoy víctima cuando trabajaba en una marisquería de Teziutlán, y quien, fue señalado por las autoridades como el presunto responsable del crimen.

Con información: La Jornada de Oriente