Al participar en el Seminario Mujer y Ciencia, organizado por la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, la universitaria destacó que Rebeca García Pinillos es una de las fundadoras de “un bienestar”, concepto que no se ha quedado en un libro, sino que ha sido adoptado y que vincula a los humanos con los animales y el ambiente.

Su antecedente, explicó, es la noción de una salud, que ha sido adoptado por muchas universidades e instituciones para resaltar el vínculo entre la salud de los humanos, el medio y los animales. “Estamos tan relacionados que las estadísticas mencionan que más de 70 % de las enfermedades en humanos tiene origen animal”, expuso Elein Hernández Trujillo.

En el término de “un bienestar” se incluye el de los animales, los humanos y la conservación del ambiente. Es innovador ya que alberga factores sociales que son relevantes, pero que no habían sido considerados en algunos otros conceptos de trabajo, como la reducción de la violencia o problemas en la producción animal.

En el ámbito humano se enfrenta el reto del crecimiento de la población mundial, que seguirá en aumento; ya se presentan problemas de acceso al agua y a los alimentos, así como el hecho de que también hay más mascotas. Según cifras de la Asociación de Médicos Veterinarios de Estados Unidos hay un incremento de casas con perros, el cual es esperado y constante. Habrá cada vez más animales de compañía que requerirán comida y recursos del ambiente.

“Cada región del país o del planeta tiene una producción de carne y leche de vacuno, carne de cerdo, carne y huevos de pollo, etcétera, por lo que los retos de bienestar animal son específicos. Son muchos los problemas por atender, pero la prioridad se establece de acuerdo con lo que hay en cada sitio”, abundó.

Sobre la crisis climática, Elein Hernández indicó que se ha trabajado en estrategias para mitigar los gases de efecto invernadero. “En esta historia, no sólo el ganado vacuno es el culpable; nosotros también tenemos responsabilidad: entre 8 y 10 % de las emisiones mundiales están asociadas con alimentos que no se consumen”.

Además de que el vínculo humano-animal es cada vez más fuerte, debe tenerse en cuenta que si las actitudes y comportamientos de una persona son adecuados con los animales, por ejemplo bovinos, la respuesta del animal será mejor. Hemsworth y Coleman han hecho grandes contribuciones al respecto.

Con menos miedo y estrés, aumenta el bienestar en general y la productividad de los animales. Si los tratamos adecuadamente, tendremos una respuesta positiva y las especies que son productivas lo serán aún más. Aunque estos resultados pueden parecer obvios, no hay mucha evidencia científica al respecto, aclaró.

En relación con el tema de bienestar animal, en que éstos tengan mejores condiciones de vida se encuentran involucrados diferentes sectores: la ciencia, la industria, los tutores y el gobierno, precisó.

Mascotas

Sobre las mascotas, Hernández Trujillo precisó que se corresponden a las diferentes generaciones, aunque los perros siguen siendo el animal de compañía preferido, independientemente de la edad de los tutores.

De acuerdo con estadísticas de este año de Forbes, la generación Z (los nacidos entre 1995 y 2000) los prefieren en 86 %; 66 % de los millennials (de principio de la década de 1980 a mediados de la década de 1990); 69 % de la generación X (los nacidos entre 1965 y 1981); 50 % de los baby boomers (entre 1946 y 1964) y 77 % de la llamada generación silenciosa (los nacidos entre 1928 y 1945).