Maestros   

Por: Gustavo Santín Nieto

Cartas a Gracia 

La persistencia de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) habría alcanzado por fin una de las metas que se habría trazado: la reanudación de las mesas de negociación que al inicio de la administración sostendrían con el titular del ejecutivo federal y autoridades educativas y que habían sido suspendidas hace veinte meses. Negociaciones que entrarían en un impase zanjado hasta que hace tan solo algunos días y en una charla banquetera con el titular del ejecutivo federal, realizada el pasado 13 de septiembre, lograría sortear. Andrés Manuel habría instruido “reanudar el diálogo interrumpido y reiniciarlo a través de la atención de la secretaria de educación” (Profelandia); orden que habría cumplido de inmediato y de ello daría fe el Boletín SEP no 225 Secretaria de Educación Pública recibe a líderes magisteriales de la CNTE, publicado un día después Gracia.   

Las fotografías circuladas por la fuente referenciada Gracia, reflejarían el tono amistoso en el que se realizaría una sesión de trabajo que reuniría a “viejos camaradas” y en la que participarían 2 mujeres y 4 hombres, integrantes de “la comisión de contacto”. No obstante y antes de pasar lista a las demandas -muchas de ellas coincidentes con las enarboladas por el SNTE- valdría la pena que las y los maestros afiliados a esta corriente de expresión sindical considerasen que los resultados de esta doble negociación -que antaño quebrara las finanzas de varias entidades-, solo podrían verificarse con el paso del tiempo, y más si se discurriera que varías de ellas se contrapondrían al proyecto educativo de la cuarta transformación (Nueva Escuela Mexicana) y a las políticas públicas de la actual administración.    

Y si bien, la representación de la CNTE que asistiera a la reanudación formal del diálogo CNTE-SEP manifestaría estar satisfecha, al tiempo que anunciaría una próxima reunión de trabajo en fecha por definir, de acuerdo a lo que reseñaran Laura Poy, reportera y analista del Periódico La Jornada y la revista digital Profelandia. Insistirían en sentarse con el titular del ejecutivo federal y así solventar pendientes, entre ellos: abrogación de “la mal llamada reforma educativa”; derogación de los UMAs como medida de pago a jubilados; asignación de plazas automáticas para los egresados de las normales rurales; reinstalación de los despedidos por oponerse a la reforma educativa; compensación monetaria a los trabajadores de la educación presos por el mismo motivo, entre otros. No obstante, por el momento, centrarían sus baterías en USICAMM; dependencia a la que acusarían de maltratar a los docentes. Las secretarias y secretarios generales de varias secciones de la CNTE señalarían: “Venimos a plantear una problemática central: que desaparezca la Ley General del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros”; demanda en la que coincidiría también el SNTE y un sin fin de maestras y maestros afectados por la interpretación de un ordenamiento cuestionado; ocasionado por el empoderamiento de la burocracia usicamita en contra del personal docente. 

No obstante, a la promesa de la reanudación del dialogo al más alto nivel Gracia, la CNTE anunciaría una jornada nacional de lucha que incluiría la realización de asambleas temáticas estatales, al mismo tiempo que sostendrían una “Reunión Organizativa de las Resistencias, 24 de septiembre de 2022”. La jornada nacional de lucha “de 48 horas” anunciada por la organización, contemplaría la suspensión de labores en las escuelas en las que contaría con una mayoría, los días 26 y 27 de octubre. Coincidentemente, se realizarían dos marchas en los días mencionados en el renglón precedente; la primera, en la CDMX que marcharía a la 4 p.m. del Ángel de la Independencia al Zócalo; y la segunda, en la ciudad de Acapulco con una trayectoria que partiría del Zócalo y arribaría a la Diana. Ni duda cabe que aplican bien el refrán “a dios rogando y con el mazo dando”. 

Sin embargo, Gracia, parecería que los astros se alinearían para la CNTE; aunque días después y para equilibrar la balanza, Leticia se reuniría con Alfonso Cepeda Salas, secretario general del SNTE, organización titular de las relaciones laborales colectivas. El Boletín SEP no 231 Se reúne secretaria de Educación Pública con la dirigencia nacional del SNTE, publicado el 20 de septiembre, daría cuenta de un “encuentro encabezado por la titular de la SEP, Leticia Ramírez Amaya, y el secretario general del SNTE, Alfonso Cepeda Salas”. La Coordinadora -lo mismo que el SNTE- tendrían de su lado una coyuntura que les volvería a tornar imprescindibles: la sucesión presidencial del 2024 y el acompañamiento que darían a quien fuese el delfín favorecido o favorecida por el resultado de una encuesta acotada por la fuerza del líder nacional. A ese momento, la CNTE agregaría un largo y retorcido colmillo político que lo mismo les permitiría hacer uso de la negociación que de la movilización de fuertes contingentes en las entidades en las que son mayoría y que le permitirían, incluso, marchar sobre el Zócalo capitalino; si bien, parecería no ser suficiente por el momento para lograr un cambio de fondo en Usicamm que les regrese a las condiciones establecidas por el apartado B de la Ley Federal del Trabajo. Los astros para la CNTE están alineados Gracia.