Luego de que la madrugada de este domingo 1 de enero vecinos de Huejotzingo agredieran a policías municipales que intentaban disolver una “guerrita” de cohetones, el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina llamó a los presidentes municipales a tener elementos certificados y con capacitación permanente.

“El uso gradual de la fuerza tiene que ser una constante y nuestros policías tienen que estar muy capacitados tristemente para recibir los ataques de la sociedad y no de la delincuencia para estarse midiendo”, dijo en su conferencia matutina.  

Cuestionado por las agresiones que sufrieron elementos policiacos en Huejotzingo que intentaron dispersar una “guerrita” de cohetones suscitada entre vecinos, dijo que confiaba en que la autoridad no dejara salir a los detenidos –por lo menos 20, según versiones periodísticas- como si fuera “una falta menor”, pues dijo que es necesario que se concienticen los alcances de este acto sobre todo porque está en puerta el Carnaval de dicho municipio. 

De paso, Céspedes Peregrina llamó a analizar de forma objetiva el grado de descomposición social en el que se ataca a la policía que lo único que fue a hacer fue a alentar sobre los riesgos del uso de juegos pirotécnicos.

“Hago un llamado a todos los habitantes en donde este tipo de costumbres se están degradando, se están perdiendo y saliendo de control pues a quienes se afectan es a las familias. Que no se esté lamentando después la falta de autocorrección, de autocontrol y auto respeto entre ciudadanos.

Para cerrar, el gobernador consideró que actos como el Carnaval de Huejotzingo es un tema de fiesta y tradición familiar, no “de grupo de vándalos” por lo que se debe actuar con conciencia. “Las fiestas son para conservar las tradiciones pero no para caer en desmanes”.

Destaca que, según se puede apreciar en un video que circuló por redes sociales el fin de semana, un grupo de vecinos que participaban en una “guerrita” de cohetones y fuegos artificiales en pleno centro de Huejotzingo fueron llamados por agentes de la Policía Municipal y Policía Estatal a detener dicha acción.

En el acto, se detuvieron a por lo menos 20 de los involucrados. No obstante, el resto de los participantes comenzaron a agredir a los uniformados persiguiéndolos con piedras, palos y cohetones, siendo obligados a huir a bordo de las camionetas y corriendo, resultando 37 uniformados lesionados.

Fuente: La Jornada de Oriente