Cartas a Gracia

 Las redes sociales comparten información, Gracia y de la misma manera en la que circulan un video en el que Manuel Gil Antón (Colegio de México) explica, como todo un maestro, los alcances de la reforma educativa, circulan varios que muestran los métodos violentos usados para dispersar a manifestantes de las plazas centrales del Distrito Federal y de la ciudad de Xalapa, Veracruz; la convocatoria y pago a quienes fueron acarreados a la celebración del grito de Independencia en la ciudad de México, el descontento con Enrique Peña Nieto, lo mismo que otros que muestran la participación creciente de atletas (“Mi primera carrera y de 7 kilómetros. Y la termine. Orgulloso de mi”) en convivencias atléticas tan disímiles como la “Carrera Nocturna Universitaria UAP 2013”, celebrada el viernes 20 de septiembre, como las convocadas, para llamar a atención y ayudar en la prevención del cáncer de mama (“Más de 5 mil corredores en la Carrera Huellas contra el cáncer de mama”, 22 de septiembre).

Que habría “nuevas reglas para quienes se integren en el futuro al sistema educativo, …” (EPNhttp://www.adnpolitico.com/gobierno/2013/08/21/penalos–cambios–en–materia–educativa–noson–negociables), que estarían comprometidos con “la reforma educativa del país”, (EPN http://www.eluniversal.com. mx/notas/889149.html), que pretenderían recuperar la rectoría del estado en materia educativa, (Emilio Chuayffet, http:// www.jornada.unam.mx/2012/12/11/politica/002n1pol), que se congratularían porque la propuesta permitiría “recuperar la rectoría del estado sobre el sistema educativo nacional en su conjunto, especialmente sobre la de carácter básico, que es la columna vertebral de la enseñanza” (Jesús Zambrano), que se consolidarían esfuerzos tan trascendentes como “la Alianza por la Calidad Educativa”, señalaría en el contexto del Pacto por México, Gustavo Madero, “que la reforma hacendaria buscaría fortalecer el federalismo”, dicho atribuido a Luis Videgaray Caso, palabras, Gracia, que se traducen en acciones que trastocarán principios y procesos generados en los últimos 21 años.

Aludiendo la concurrencia educativa, a las facultades que el artículo 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos otorga la Congreso de la Unión, “a las propuestas realizadas por la Conago”, a un diagnóstico previo que reconoce distorsiones, inequidades, disparidades, desviaciones, presiones “de gasto inercial derivada de nómina educativa.” (producto de una doble negociación salarial), la “iniciativa de decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la Ley de Coordinación Fiscal y de la Ley General de Contabilidad Gubernamental, en materia de financiamiento educativo.” (http://www.apartados.hacienda.gob.mx/presupuesto/temas/ppef/2014/index.html), plantea que “se considera necesario modificar los términos y condiciones bajo los cuales, en el marco del financiamiento conjunto entre los órdenes de gobierno que mandata la propia Constitución, se transfieren recursos federales a las entidades federativas y municipios para apoyarlos a cubrir las atribuciones que les corresponden en materia educativa.”, razón por la que propone “la creación del Fondo de Aportaciones de Nómina Educativa y Gasto Operativo (Fone), el cual generará un adecuado control administrativo de la nómina de los maestros transferidos a los estados en el marco del Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 19 de mayo de 1992, así como por los convenios que de conformidad con el mismo fueron formalizados con los estados por parte de la Federación. El Fone incluirá los recursos para cubrir los gastos en servicios personales correspondientes al personal que ocupa las plazas transferidas (no las subsidiadas) a los estados en el marco del acuerdo a que se refiere el párrafo anterior, las cuales serán registradas por la Secretaría de Educación Pública, previa validación de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, dentro del Sistema de Información y Gestión Educativa, recientemente aprobado en la reforma a la Ley General de Educación.”.

Elegante manera Gracia que el gobierno central adopta, para señalar que no confía ni en tirios (personal docente), ni en troyanos (gobernadores de la entidades, autoridades locales). Ni en los tirios, a quienes responsabiliza por los malos resultados que obtienen sus alumnos en evaluaciones internacionales y domésticas, ni en los troyanos, a quienes culpa por desviar recursos por el pago de comisionados a otras dependencias y/o a partidos políticos, por “tomar prestado” efectivo para cubrir el gasto corriente de la entidad mientras “llegan” las participaciones federales (“El Fondo de Aportaciones para la Educación Básica (FAEB) incluso se usó contraviniendo la normatividad, como una especie de fondo emergente para los estados, José Ángel Pescador Osuna, ex Secretario de Educación Pública), por cubrir con recurso del Fondo de Aportaciones para la Educación Básica, campañas políticas locales y federales, por permitir la existencia de un sin número de aviadores entre los que destacan funcionarios públicos adscritos a otras dependencias y/o sectores de la administración pública, por pagar acarreos políticos de diferente naturaleza, por financiar campañas de publicidad no autorizadas por el FAEB, por cubrir con el Fondo, prestaciones pactadas localmente –para trabajadores y trabajadoras de la educación de origen federal y local– producto, en muchos casos, de la doble negociación y/o de la componendas políticas, por pagar estímulos y gratificaciones pactadas localmente no autorizadas ni reconocidas por las secretarías de Hacienda y Crédito Público y de Educación Pública, por cubrir los gastos de las oficiales y oficiosas asociaciones de padres de familia, por apoyar eventos culturales y deportivos, en una palabra, por tranzarse la lana. Los afanes centralistas de la presidencia de la República, recaerán en quienes autorizarán la modificación la propuesta. (Congreso de la Unión) en tanto Gracia, creo que quieren todas las canicas y que mejor que mostrarlo con sus propias palabras.