AC sí interviene en el conflicto de la BUAP, lo reconoció en mesa de trabajo con la Segob: Armenta

La organización Antorcha Campesina ya reconoció en una mesa de trabajo con la Secretaría de Gobernación (Segob) que tiene participación directa e indirecta en el paro de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP), reveló el gobernador Alejandro Armenta Mier.
Al salir de un encuentro con empresarios, el mandatario insistió por tercer día consecutivo que la agrupación “tiene intereses en la universidad, lo sabemos y hay que decir la verdad”.
El morenista coincidió con la declaración de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, al referir que habrá respeto a la autonomía universitaria por parte de la autoridad, pero este también debe ser de los partidos políticos y organizaciones.
“Nosotros no podemos poner plazos para que se levante el paro, somos respetuosos y en eso no podemos intervenir, pero si sigue tomada la universidad están en riesgo 120 mil alumnos que pueden perder un ciclo escolar, hay que poner eso en la mente de quienes están planteando todo o nada”, declaró.
Expuso que, en la mesa de trabajo con la Secretaría de Gobernación (Segob), Antorcha Campesina reconoció su intervención en el conflicto estudiantil, por lo que exhortó a cuidar la universidad.
“Los partidos ni las organizaciones tienen porque involucrarse en las decisiones que toman los jóvenes”, exigió.
A pesar de las críticas por señalar a la organización de infiltrarse en el movimiento universitario, que lleva tres semanas en paro, respondió que conoce el actuar y el procedimiento de la organización que por décadas fue filial al PRI.
“No hay ignorancia, omisión ni inocencia política, que no ofenda la inteligencia de la autoridad, es claro que tienen participación directa e indirecta”, acusó.
En una negociación “hay que ceder, no es todo o nada”
Alejandro Armenta dijo que se tiene que llegar a acuerdos a través del diálogo, para evitar que se sigan violentando los derechos de los estudiantes, lo cual afirmó incurre en la comisión de delitos.
Reconoció que “todas las demandas de los universitarios son justas y las autoridades, juntos con ellos, tienen que buscar puntos de coincidencia”, sin embargo, señaló que en una negociación “los acuerdos no es todo o nada, hay cosas que económicamente no son posibles”.
Al final, expuso que la prioridad debe ser en beneficio de la universidad, que es de todos, donde las partes en conflicto deben ceder para cumplir, en la medida de lo posible, el mayor número de demandas de los jóvenes.
Con información: La Jornada